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MANEJO DE MATERIALES Rodillos transportadores para la nueva industria de la conversión
Rodillos transportadores para la nueva industria de la conversión

Aunque en esencia, la función de los rodillos transportadores sigue siendo la misma, actualmente las fábricas apuntan hacia modelos de producción más automatizados y esto ha derivado en la evolución de los elementos utilizado en las líneas de producción.

Los rodillos son una pieza esencial para el transporte, acumulación y distribución de mercancías en procesos repetitivos, pues sin estas piezas modulares, la manipulación y procesamiento de mercancías dentro de diversos sectores industriales sería menos eficiente o simplemente no sería viable.

Los rodillos comúnmente están hechos de metales de alta calidad. No obstante, debido al gran número de aplicaciones en las que se les emplea, así como a las cambiantes exigencias de los diversos sectores industriales en los que se utilizan, existen fabricantes que diseñan y producen rodillos transportadores dependiendo de las especificaciones requeridas.

Con respecto a su estructura más básica, los rodillos transportadores se componen de ejes de rodamientos, que son elementos rectilíneos localizados en el interior del rodillo y que facilitan el giro del cilindro; rodamientos, situados en los extremos del eje y encargados de reducir la fricción producida entre el eje y las demás piezas conectadas a él; y el cilindro, la pieza más visible y conocida, la cual envuelve al rodillo.

Aunque en esencia, la función de los rodillos transportadores sigue siendo la misma, actualmente las fábricas apuntan hacia modelos de producción más automatizados y esto ha derivado en la evolución de los elementos utilizado en las líneas de producción, siendo las cintas transportadoras una pieza clave.  

Un ejemplo de esta evolución es el encontrado en los rodillos motorizados, los cuales, debido al ahorro de espacio que proporcionan, su poco ruido y su fácil mantenimiento, se han convertido en una opción comúnmente elegida por los transportadores de ciertas mercancías como paquetes o cajas.  

Los rodillos curvos (banano) suelen ser robustos y precisos, pues necesitan asegurar operaciones libres de vibraciones.
TTEMSA

Otra característica que ha hecho destacar a esta tecnología es la de su función “ejecutar solo a pedido”, la cual permite que los rodillos motorizados se apaguen cuando no se detecta el producto, lo que se traduce en ahorro de energía y, en consecuencia, de dinero. Asimismo, esta función ha contribuido a que estos rodillos puedan ser utilizados en conjunto con robots de almacén o robots móviles autónomos, vinculando así diversas tecnologías para una máxima productividad automatizada.

Si bien los rodillos motorizados son una opción destacable para el traslado de mercancías en operaciones de conversión (como empaques), es justo decir que también existen aplicaciones para las que no son la primera opción. Por ejemplo, no son útiles para su uso en hornos, pues, aunque es posible encontrar modelos especiales, los motores de estos rodillos no toleran temperaturas demasiado altas. Tampoco son recomendables para empresas de grado alimenticio, pues sus correas suelen atrapar suciedad.

La conversión y los rodillos
Los procesos productivos utilizados en la conversión de rollos a productos industriales y de consumo, o a materiales de empaque, ha contado con los rodillos como pieza clave de sus líneas, por ya varias décadas.

Ya sea que se trate de fabricantes de, por ejemplo, cortinas para baño, cubiertas para albercas o servilletas, entre muchos otros productos, o fabricantes de empaques e incluso impresores industriales, para elegir el rodillo más adecuado es necesario comparar factores como los de: velocidad requerida, robustez, tolerancias precisas, ambientes cambiantes, limpieza, químicos corrosivos, temperaturas y variedad de materiales.

Además de los factores antes descritos, antes de elegir el rodillo ideal para la aplicación en cuestión, es vital informarse sobre los avances de estas piezas. Por ejemplo, la compañía TTEMSA comercializa los rodillos de aluminio UltraLight, los cuales, debido a que son de baja inercia, son ideales para aplicaciones de envoltura pequeña y baja tensión.

Con base en información de esta firma, los rodillos locos UltraLight son “adecuados cuando el deslizamiento de la banda es inaceptable”. Además, pueden llegar a pesar 60% menos que los rodillos de aluminio estándar y 25% menos que los rodillos locos Webex de peso ligero (también comercializados por la compañía).

Otra tecnología utilizada por industriales pertenecientes al sector de la conversión y que ha evolucionado en los últimos años, es la de los rodillos curvos, también conocidos como “bananos”.

Los rodillos bananos se utilizan para prevenir o eliminar arrugas en operaciones que incluyen procesamiento de papel, telas o películas plásticas. Éstos, debido a las cambiantes exigencias del mercado, han ido cambiando de material y actualmente es común encontrarlos hechos de hule sintético o con materiales compuestos para aplicaciones específicas.

Finalmente, otro caso que ejemplifica el constante cambio y evolución de los rodillos utilizados dentro de la industria de la conversión es el encontrado en los rodillos Webex de vacío, también comercializados por TTEMSA. Éstos son recomendados para aplicaciones en “las que los rodillos de presión o contacto con ambos lados de la banda no es posible o deseado”, según destaca la misma empresa en un artículo técnico.

Los rodillos de vacío son utilizados, por ejemplo, para la producción de bandas ultrafinas, papeles sensibles a la presión, productos decorativos, cintas adhesivas, además de películas ópticas para las industrias aeroespacial, biomédica y farmacéutica.

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