Notas editoriales

Hoy más que nunca es necesario crear e implementar una política industrial efectiva, orientada hacia la Industria 4.0, pues a través de esta se podrá impulsar el desarrollo económico de México, así lo señaló Francisco Cervantes Díaz, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin).

Bajo el argumento de que sin inversión no hay crecimiento y sin política industrial no hay desarrollo económico, José Luis De la Cruz, presidente de la Comisión de Estudios Económicos de la Concamin, explicó que los estados que muestran mayor tasa de crecimiento y menos índice de pobreza -como Nuevo León, Baja California y Querétaro- están más vinculados con la industrialización.

Caso contrario es lo que se muestra en los estados con poca industria, donde se ve bajo crecimiento económico y altas tasas de pobreza, situación que se vive en estados como Guerrero, Chiapas y Oaxaca.

En el marco de la firma del convenio “Alianza por la Transformación Industrial de México”, realizada por la Concamin y la Asociación Mexicana de Secretarios de Desarrollo Económico (AMSDE), De la Cruz señaló los fundamentos en los que la política industrial en el siglo XXI debería basarse:

• Fortalecimiento en la colaboración público-privada: Esta permitiría dar una respuesta eficaz a los retos mundiales acelerados por la pandemia

• Relevancia del Estado y su capacidad de invertir: El Estado debe de replantear la importancia de invertir más en la industria para promover el desarrollo, pues el bajo crecimiento y precarización social que se ve en algunos estados está asociado a los bajos niveles de inversión

• Revolución digital: Se debe generar una Agenda Digital que atienda los desafíos internos del país, sus rezagos y el bajo crecimiento, pero que además aproveche las oportunidades de asociación intraindustrial que brinda el T-MEC

En este sentido, refirió que el enfoque para esta política debe estar centrado en el desarrollo del ser humano para construir una sociedad de bienestar, alineado a elevar el desarrollo económico y social del país.

Añadió que el concepto clave que se tiene que entender es que la innovación social es igual a la innovación industrial, pues la tecnología no está peleada con el desarrollo social si se logran tener los pilares de desarrollo, educación e inversión que le den las fortalezas para adaptarse y adoptar la evolución tecnológica sin verse desplazado por la misma.  

Durante la firma del Convenio también se contó con la participación del presidente de la Comisión de Innovación e Industria 4.0 de la Concamin, Alfred Rodríguez, quien destacó que la visión de los países más desarrollados en cuanto a la industria es:

• Más humano: Reconoce el valor del capital humano al ser conscientes de que sin talento no se puede avanzar

• Más digital: Representa una gran oportunidad para México si se crea la Agenda digital y se forma al capital humano bajo este enfoque

• Más verde: El sector industrial considera el cambio climático y trabaja bajo las normas, reglas y leyes que promueven la sustentabilidad

• Más resiliente: Si la industria considera los tres puntos anteriores será más atractiva y tendrá más oportunidades de dejar atrás la crisis actual

La pandemia de Covid-19, la crisis económica subsecuente y la caída industrial que se vio en todos los estados del país, a excepción de Tabasco, hizo evidente la falta de nuevas estrategias que atiendan los rezagos sociales y económicos que tiene el país, por ello, la creación de una política industrial integral podría favorecer la competitividad y lograr una reactivación económica efectiva en México.