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En la actualidad, los consumidores conservan sus vehículos por más tiempo y por ello son conscientes de la importancia de realizarles mantenimiento preventivo con revisiones programadas para maximizar su vida útil.

Sin embargo, en la mayoría de los casos se relega a segundo plano la importancia de conservar en perfectas condiciones a la pintura del automóvil siendo que gracias a ella se protege a la carrocería contra la oxidación.

Para evitar que esto suceda, varias compañías trabajan para desarrollar nuevas tecnologías que simplifiquen y aceleren la dispensación de pinturas en automóviles gracias a la ayuda de una capsula.

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Un ejemplo es Covestro —compañía fabricante de polímeros de alto rendimiento—, que cuenta con sistemas que buscan simplificar la preparación de una capa transparente de dos componentes al combinar todo el proceso de mezcla en un solo recipiente para el repintado de automóviles en menos tiempo.

Con este tipo de sistemas, la cápsula se atornilla a una pistola de aire con la ayuda de un adaptador y el recubrimiento transparente está listo para su uso inmediato, lo que evita que los pintores automotrices necesitan otro equipo adicional.

La cápsula es adecuada para la mayoría de los recubrimientos transparentes convencionales de dos componentes.

De esta manera, como no es necesario abrir ningún recipiente, los componentes y, por lo tanto, los revestimientos están protegidos del polvo y la suciedad.