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En los últimos años el mercado laboral se ha visto inmerso en varios escenarios que lo han colocado en una situación muy incierta, como la pandemia de Covid-19 y la consecuente crisis económica que prosiguió, pero sin duda uno de los temas que ha generado mayor debate son las nuevas tecnologías y las repercusiones que puede tener en la conservación o generación de empleos.

Algunos expertos consideran que con la cada vez mayor implementación de tecnologías de automatización, como los robots, con el tiempo serán necesarios menos empleados, mientras que otros señalan que la creación de estas innovaciones ocasionará la demanda de nuevos especialistas que sepan manejarlas.

Automatización vs. Capital humano

De acuerdo con el Informe sobre el Futuro del Empleo 2020, realizado por el Fondo Económico Mundial, para el 2025, la automatización y una nueva división del trabajo entre humanos y máquinas generarán alteraciones en 85 millones de empleos a nivel mundial en empresas de todos los tamaños y en diferentes industrias y economías.

El documento también señala que la demanda en roles como la entrada de datos, la contabilidad y el apoyo administrativo están disminuyendo a medida que aumenta la automatización y digitalización en el lugar de trabajo.

Dejando de lado su efecto en los empleos, la automatización ha demostrado ser la solución más asertiva para dar resiliencia a las empresas, por lo que su implementación no es discutible, al contrario, es necesaria y de acuerdo con el estudio “RPA Latam 2020 Insight” elaborado por Practia, empresas de tecnología y negocios, si bien antes de la pandemia los principales factores que se consideraban para invertir en automatización eran menores costos, mejor desempeño y mayores ingresos, en 2020 esto cambió dando prioridad a la necesidad inmediata de continuidad y resiliencia del negocio, así como a la disminución de riesgos.

Ya sea por como estrategia para poder seguir operando sin poner en riesgo a su personal o para aumentar su productividad, calidad y eficacia, “más del 80% de los negocios están acelerando planes para digitalizar los procesos de trabajo e implementar nuevas tecnologías; y el 50% de los empleadores esperan acelerar la automatización de algunos roles en sus empresas”, destacó Manuel A. Sordo, General Manager para Latinoamérica de Universal Robots.

Reconversión laboral

Aunque la automatización podría afectar a 85 millones de empleos a nivel mundial, el Informe del Fondo Económico Mundial también menciona que a medida que evolucionen la economía y los mercados laborales, surgirán 97 millones de nuevos roles alrededor del mundo.

Estos nuevos empleos, también conocidos como “trabajos del futuro” se darán principalmente bajo el efecto de la cuarta revolución industrial, en sectores tecnológicos como la inteligencia artificial, manufactura y en los campos de creación de contenido.

Estas nuevas plazas estarán destinadas a aquellas profesiones que se adapten mejor a la nueva división del trabajo entre humanos, máquinas y algoritmos, y los candidatos deberán cumplir con destrezas que los empleadores consideran que cobrarán importancia en el período previo a 2025, entre las que se incluyen el pensamiento crítico, la resolución de problemas, el aprendizaje activo, la resiliencia, la tolerancia al estrés y la flexibilidad.

Otro factor que se considerará en esta nueva oportunidad de trabajo es la capacitación, pues se prevé que la proporción de habilidades básicas que cambiarán en los próximos cinco años es del 40%, por lo que cerca del 50% de todos los empleados necesitarán volver a capacitarse.

Si bien la automatización gana terreno en varios sectores de la industria, es importante considerar que hay tareas que no puede desarrollar, y es justo en estas donde los seres humanos deben estar preparados para conservar su ventaja comparativa. Algunas actividades son la gestión, el asesoramiento, la toma de decisiones, el razonamiento, la comunicación y la interacción.